Siguiendo los pasos de Franz Liszt, Richard Strauss creó nueve poemas sinfónicos entre 1886 y 1903, que denominó “poemas tonales”. Strauss, que también tuvo mucho éxito como director de orquesta, tira aquí de todos los recursos de la orquesta del romanticismo tardío y siempre encuentra nuevos timbres para la caracterización de personajes tan diversos como Don Juan, Macbeth o Till Eulenspiegel.
Con la “Sinfonía Alpina”, que traza musicalmente una excursión por la montaña, puso fin a esta serie de obras tras una interrupción de diez años.
Tone Poem for Large Orchestra after N. Lenau
Para: Orquesta sinfónica
Partitura (Urtext)
№ de artículo: 1021506